Stanko Radikon era un ícono en el mundo del vino natural. Un inconformista en una tierra de inconformistas. Un visionario que ha arriesgado todo, dinero cuando no había, mercados y clientes consolidados que lo han desconocido. Es el 1995 cuando empieza a experimentar la maceración con cascaras por la Ribolla Gialla, uva indígena de esta tierra de confín. Estamos en Oslavia, norte-oeste de Italia en la región de Friuli, lugar fronterizo con Eslovenia.

El viñedo de Radikon fue originariamente sembrado por el abuelo de Stanko Franz Mikulus después de la primera guerra mundial y a partir del 2016, cuando Stanko pasó a otra vida, es Saša el hijo que sigue la filosofía del padre.

Radikon es hoy famoso por sus “vinos naranjas” que como dice Saša “es esencialmente vino blanco hecho con técnicas de vino tinto”. Larga maceración con cascaras para extraer el máximo sabor.

La tierra de Radikon cuenta con doce hectáreas de vides donde se cultiva principalmente Sauvignon Blanc, Chardonnay, Pinot Grigio y Merlot. La uva local Ribolla Gialla, que solo crece en unas colinas cerca de Gorizia y el Tocai Friulano son también una parte importante de sus vinos.

Son uvas que benefician del tipo de terreno que en esloveno es llamado ‘Ponca’, una mezcla compleja de arenisca, arcilla y depósitos marinos que junto a la maceración y los tiempos de envejecimiento en antiguos barriles de roble, crean vinos poderosos, ricos de minerales y de de rara intensidad.